El cambio climático ha afectado a nuestro planeta considerablemente. El excesivo consumo energético de los edificios residenciales. Este sector se convierte en el responsable de emitir el 30% de las emisiones directas.
Debido a ello, se fomenta las ciudades energéticamente sostenibles: la transición energética urbana 2030. Los hogares actuales de España no cumplen los requisitos de ahorro energético, lo cual se estima que dos tercios de las viviendas requieren rehabilitación y mantenimiento.
En Administración de Fincas Cañavate hablamos sobre algunos tips para mejorar la eficiencia energética en la comunidad de vecinos;
Sistemas Centralizados de Trabajo
Con un sistema de energía centralizado, todas las necesidades eléctricas del edificio serán cubiertas por un solo generador. Estos sistemas utilizan agua como elemento de transferencia de calor. Con el aire acondicionado central, las necesidades de refrigeración y calefacción se satisfacen durante todo el año con un alto grado de fiabilidad.
Con este sistema, el agua se distribuye a cada consumidor a través de tuberías preaisladas que son capaces de mantener la temperatura del agua desde el momento de la producción hasta que llega a cada residencia.
El funcionamiento de un sistema centralizado debe ajustarse mediante un buen mantenimiento preventivo, los equipos más eficientes o ajustando la comodidad, los horarios y los gastos generales.
Auditoría Energética de la Comunidad
Una perspectiva social sobre la energía puede ayudar a evaluar el consumo de energía y comprender qué se puede cambiar para mejorar la eficiencia.
Iluminación con un bajo consumo
Un sistema de iluminación eficiente requiere instalar sistemas de detección de personal y temporizadores o programar la iluminación por zonas para evitar encender todas las luces de la comunidad al mismo tiempo.
Uso eficiente del ascensor
Si se instala un sistema de registro de personas, se puede reducir el consumo de luz en el ascensor. También es posible integrar el encendido de las luces cuando arranca el ascensor.
Aislamiento térmico
Si la estructura del edificio está mal aislada, un sistema eficiente de calefacción o refrigeración es menos eficiente.
Esto sucede porque las paredes, ventanas y puertas pierden comodidad.
Mejorando el aislamiento térmico del edificio, se pueden reducir las necesidades de calefacción en un 40% en invierno, mientras que en verano no se necesita aire acondicionado.