La gran mayoría de los sectores se han visto afectados con la llegada de la crisis. Administradores de fincas, comunidades de propietarios y vecinos de estos, también están involucrados en estos tiempos de incertidumbre.

El cambio supone encontrar soluciones para los nuevos problemas que suceden en la actualidad. En Administración de Fincas Cañavate, hablamos sobre algunos de los retos a los que nos enfrentamos este año;

Aumento de las cuotas

La inflación global recae principalmente en el aumento de las cuotas creando una inestabilidad en el sector inmobiliario, obligándolo a aplicar medidas en el modelo de negocio. 

De esta manera se garantiza su estabilidad y rentabilidad. Las comunidades de propietarios podrían aumentar sus cuotas mensuales hasta el 40%.

Digitalización 

La transformación digital es uno de los objetivos y metas que más se quiere conseguir. 

El inicio de la pandemia nos obligó a digitalizarnos, acelerando cada vez más el proceso. Esta decisión se muestra como una mejora del servicio al cliente. 

Además, este factor destaca en la reducción de papel en las oficinas, reduciendo a su vez un alto porcentaje el tiempo de resolución de incidencias.

Más nivel, mayor exigencia

Las comunidades de propietarios exigen cada vez más a los administradores de fincas . Los propietarios esperan que los administradores sean cada vez más proactivos, a la misma vez que su supervisión es más frecuente por lo que necesita más tiempo para realizar todas las gestiones”.

La frustración generada por los procesos de gestión actuales ha creado la oportunidad de encaminarse hacia un entorno digital, que permite agilizar la toma de decisiones, democratizar los procesos y facilitar la participación, y generar engagement en la comunidad.

Desde Administración de Fincas Cañavate, trabajamos cada día para adaptarnos a estos cambios que surgen en la actualidad, con el objetivo de aportar nuestro mejor servicio a cada cliente.